Extractos del Libro seguir sin ti de Silvia Salinas y Jorge Bucay

Es
todo un desafío, poder expresar lo que a uno le pasa en pareja. Sin acusar al
otro y sin defenderse.

Hay
una responsabilidad en uno de los miembros que es la responsabilidad de tomar
la iniciativa por romper un pacto.

Es
entonces cuando afloran nuestras conductas más neuróticas e infantiles…

Las
ganas de volver a estar juntos, es el elemento clave que hace que una relación sea
potencialmente salvable luego de una infidelidad o crisis de pareja importante.

Cuando
hay ganas de estar juntos, el corazón de ambos se rebela ante la posibilidad de
una separación definitiva.

Cuando
el ojo de la tormenta pasa y las emociones se estabilizan tanto el uno como
otro, necesitan gestos concretos de su compañero o compañera, especialmente
aquellos gestos que demuestran que el otro me sigue importando. Que es
importante para mi seguir teniéndolo en mi vida.

Que
estoy haciendo y que estoy dispuesto a hacer para que mi pareja note lo mucho
que importa? La suma de minúsculos gestos cotidianos es lo que crea el clima
favorable para el reencuentro.

No
hay manera de saber de antemano como va a funcionar una relación, ni de
calcular si va a durar pero se lo consigue entregándonos a lo que hay, sin
exigencias y sin expectativas. No es fácil.

Cuando
uno ha sido herido y no quiere que le vuelva a pasar lo mismo, para evitarlo,
tenemos ideas, estrategias, expectativas, de cómo debería ser nuestra próxima relación.
Nos volvemos rígidos, exigentes y no dejamos que la relación fluya en forma
natural. Queremos “empujar el rio para nuestro lado”, para que corra por donde
decidimos que nos conviene y entonces la relación se vuelve forzada y sin
libertad.

A
medida que crecemos dejamos atrás la manera de enamorarnos de los veinte años, quizá
quede atrás algo de locura, pero pueden abrirse paso la profundidad y la
madurez, una madurez necesaria para que sin dejar de buscar un amor perfecto,
seamos capaces de disfrutar de un amor real entre personas reales.

Si
somos lo suficientemente valientes como para reconocer esta situación, podríamos
convertir al otro en un maestro en lugar de un enemigo. Si sabemos mirarlo de
esta forma, la magia puede volver y los conflictos pueden convertirse en una
señal pero positiva, de los aspectos que cada uno debe desarrollar.

Cuando
la grieta se produce, cada integrante de la pareja comienza a ver en aquel que
antes lo completaba, el rostro de un enemigo.

Como
se sale si es que hay salida?

La
relación de pareja es uno de los más grandes espejos que tenemos para mirarnos,
el mejor y el más cruel de los espejos. Nos enojamos porque la imagen que el
nos devuelve no nos gusta. Entonces es el espejo el que nos hace horribles?

Nos
enojamos con el que da la noticia que no queremos recibir, quisiéramos actuar
como Caligula, matando a todo aquel mensajero que no trae buenas noticias, como
si con eso consiguiera que la mala noticia desaparezca.

Apelando
a la valentía de mostrar las partes vulnerables para pedir ayuda en lugar de
levantar muros de defensa. Cuando las partes débiles de los dos que discuten
consiguen conectarse y comprenderse, crece la confianza y cada uno puede ser el
maestro del otro, allanando el camino para que la mágica conexión de almas
aparezca.

Por
mas que vivamos planificando y pretendiendo controlarnos a nosotros mismos y a
nuestro entorno nada suele suceder como esperamos. Este hecho es tan
verificable en la realidad que se parece más a una verdad de Perogrullo que a
un pensamiento intelectual. Y sin embargo, hay un montón de gente que actúa,
vive y siente como si las cosas no funcionaran así.

Discutir
y agredir al otro por algo que ya nos hizo y nos lastimo, es un acto de
inmadurez absoluta y básicamente una batalla perdida.  Porque lo que esta hecho, hecho esta.

Mirando
hacia adentro apareció un mi un sentimiento casi ya olvidado… No sabia como
hacer para aceptar mis limitaciones sin olvidar de reconocer mis capacidades.

Mas
que nunca cuando formamos una familia la sociedad nos anuncia que ha llegado la
hora de funcionar mas como “se debe” que de acuerdo con lo que se sentimos en
cada momento.  Asi es como solemos
perdernos a nosotros mismos y vamos renunciando de a poco a la alegría, a la frescura
y  a la espontaneidad. No hace falta
decir, que sin estas tres herramientas, no puede haber una sana sexualidad…

Es
por eso que muchos, entran en una carrera frenética de cambio de compañero, de
salir con cualquier persona… buscando sexo por sexo mismo. Pero ese sexo de la
genitalidad, no implica una conexión con el otro. Ese sexo no eleva a nadie.
Porque en sentido estricto es un sexo sin sexualidad. Mantener y desarrollar un
contacto sano con la vida es ser uno mismo y enamorarse de estar vivos en todos
sus aspectos. En eso consiste el cultivo del terreno del amor. Cuando el
terreno está listo, la mayoría de las veces florece nuestra mejor sexualidad,
lo que posiblemente incluya lo genital, pero que no se acaba ahí.

Hay
que ser conscientes de que en verdad no es posible “tener” nada, mucho menos a
alguien. Pero preferimos dar por sentado que nada cambiara. Miramos nuestro
compañero y creemos estar viendo siempre al mismo, porque decidimos que así es.
Pero no es.

No
pienso que la pasión tenga que sostenerse sobre la base del miedo a perder al
otro, porque estoy segura que nada bueno puede crecer basado en el miedo. Digo
que las parejas duraderas están hechas de una sabia mezcla de cercanía y
espacio. Cercanía que genera intimidad, respaldo y seguridad. Espacio que nos
hace libres y conscientes de nuestras posibilidades de cambio. No hay límites
para cambiar, porque no hay límites para crecer y ese es el sentido de la
pareja: Crecer  al lado del otro. La vida
compartida es una oportunidad para eso.

La
verdadera pasión no se mantiene cambiando de partenaire todos los días, sino
descubriendo que nosotros, los dos, somos un poco distintos cada mañana, y a
partir de allí, el sexo, la pasión, el deseo y la atracción por el otro pueden
renovarse dia a dia. Es necesario entrenar la pasión. Ya que no hay cosas
apasionantes sino pasión puesta en las cosas.

Es
inútil además de poco aconsejable, siquiera intentar tenerlo todo bajo control
o querer anticiparse a lo que sigue. En esa época aprendí que, nos guste o no
lo que la vida tiene para darnos no se detiene a escucharnos, la vida fluye,
solo fluye.

Cuando
luchamos contra lo que es, por ser como es, interrumpimos el libre fluir de los
acontecimientos y evitamos que la situación pueda evolucionar hacia mejor.

Hay
un ejercicio muy bueno que nos ayuda a salir de la no aceptación de cosas que
nos pasan y nos corren del papel de victimas en el podemos encontrarnos, pensar
que:

Para
aprender a…

Para
darme cuenta de que…

Entender
es con la cabeza, comprender es con el corazón. Y si mi corazón está herido,
muy difícilmente pueda terminar de asimilar lo que haya pasado.

Igualmente
hay que reconocer que fue él, quien me enseño a tomarme la vida con mas
levedad, a no hacerme tanto problema por cada cosa.

Me
siento estafada, no tenida en cuenta y una vez más abandonada. Una vez más no
elegida… Sentimiento terrible para la autoestima de una mujer…

Nuestro
compañero o compañera es un maestro. Alguien que nos enseña cosas importantes
de maneras muy extrañas (a veces provocando nuestra furia).

El
amor y sus vaivenes, los encuentros y desencuentros, son guías que nos muestran
los problemas que siguen habitándonos y que somos capaces de ver de otra
manera.

No
hay conflicto que no tenga salida. Lo que cierra el camino no es el conflicto,
sino el orgullo, el endurecimiento, la cerrazón. El precio de nuestra reacción no
lo paga solamente la relación de pareja, sino que nosotros mismos perdemos
contacto mismo con la magia de la vida. Nos volvemos personas cerradas. La idea
y el deseo de que es posible complementarme con el otro.

No
es necesario que nadie me de lo que yo ya tengo. Nada nos falta. Pero si
precisamos, una y otra vez de alguien que con amor sea el espejo en el que
podemos vernos sin temor. Esa será la ayuda que me permitirá destrabar los
mecanismos que me impiden volverme la mejor persona que yo puedo ser.

Tener
un vínculo fuerte y duradero es lo que toda persona normal aspira. Tener una relación
clara. Lo vivido fue y es importante.

El
camino no es estar de acuerdo con lo que el otro hace después de separado, pero
se puede intentar entender sus razones, aunque sean muy distintas de las propias.
Aceptar que el otro tiene sus razones para hacer lo que hace aunque yo no lo
comparta. Por algo las personas se separan…

No
es el más seguro de los hombres pero me dio seguridad.

No
es el más valiente pero siempre  me ayudo
con mis miedos.

No
 es 
el más exitoso pero siempre me ayudo con mi desarrollo personal y
profesional.

Me
apoyo siempre y yo crecí mucho a su lado.

La
vida siempre concede más de una oportunidad para darnos cuenta de todo lo que
nos sucede y para crecer en ese darnos cuenta. El cosmos conspira para que las
mismas situaciones se repitan una y otra vez, hasta que aprendamos lo que
debemos aprender de ellos.

La
jugada era tan maquiavélica como eficaz. El había querido que yo me entere,
pero sin decírmelo directamente.

Nada
a lo largo de la vida permanece constante. Poco o mucho, cada uno de nosotros
va cambiando en sus pensamientos, en sus gustos, en sus comportamientos. Del
mismo modo, el mundo que enfrentamos se transforma día a día. Lo que aprendimos
ayer, quizá no sirva, tal cual, para hoy, porque hoy otras cosas suceden y aun
las mismas cosas pasan de forma diferente. Este cambio constante es lo que
transforma la vida en una apasionante y sorprendente novedad continua y
cotidiana. La pareja es parte de la vida de una persona, y esta sujeta a los
mismos cambios para los que no siempre estamos preparados, y por lo tanto es
inevitable que las crisis de pareja ocurran. Algo nuevo sucede o viene
sucediendo y rompe el equilibrio al que se había llegado y no es posible
arribar a un nuevo equilibrio, entonces se produce la crisis. Es algo norma y
natural, es parte de la vida de la pareja. Si queremos que la pareja perdure,
no se trata de evitar los “desequilibrios” sino de aprender a resolverlos.

Detrás
de cualquier crisis hay un desbalance. El centro se ha corrido, los miembros de
la pareja ya no se perciben el uno al otro en igualdad de condiciones “como
antes”.

Necesitamos
dar y recibir, especialmente en la pareja si queremos seguir creciendo al lado
del otro. Para que haya verdadera intimidad en una atmosfera relajada, ambos
individuos necesitan tanto sentir que dan algo de si, como saber que también reciben
algo.

La
mutua alimentación no siempre puede mantenerse equilibrada.

Hay
muchas circunstancias que inclinan la balanza a lo largo de la vida de la
pareja.

Aprendí
que las heridas, los desencuentros, y las crisis son ciertamente dolorosas pero
es completamente imposible evitarlas si hablamos de una relación comprometida.

Hay
una herida esencial que todo ser humano tiene. Y esa herida es no querernos lo
suficiente.

Hay
un ejercicio de Jorge Bucay que propone escribir cosas que no hemos recibido en
la infancia y hubiéramos querido que sucedieran…. “Un papa que me escuchara y
estuviera presente cuando yo lo necesitaba”. Y luego se cambia a esa lista, la
consigna por coas que espero de un hombre. El resultado es sorprendente, viví
toda mi vida buscando en cada encuentro un papa que me diera el amor que no recibí
de niña y que por eso no sentía dentro de mi. La sanación ocurrió cuando pude
conectarme con el amor que los hombres me habían dado, comenzando por mi padre,
en lugar de enojarme por lo que no me pudieron dar. La sanación ocurrió cuando
pude ver a la niña herida dentro mío dentro de todas las personas que me
amaron, y valorar lo que me dieron…

Me
pase la vida buscando a alguien que llenara el vacio del amor que acarreaba de
la infancia y finalmente había descubierto que mi vida estuvo siempre sostenida
por el amor que llevo dentro.

Te
quise mucho, todo lo que te di te lo di con ganas, tú me diste muchísimo y te
lo agradezco. Pero nos dijimos un montón de cosas feas , sumamente dolorosas y todo quedo mal entre
nosotros,  yo asumo mi parte, y espero que
vos asumas la tuya. Aunque te agradezco por todo lo feliz que me hiciste y el dolor que me causaste.

28 comentarios sobre “Extractos del Libro seguir sin ti de Silvia Salinas y Jorge Bucay

  1. esta muy bueno los artículos que publican o que han publicado, me pregunto porque esta abadonado ultimamente…. sirve d emucho para los hombre sy mujeres del mundo… siganle

  2. .realmente me encaqnto todo lo q lei una amiga me recomendo q me comprara el libro seguir sin ti .ya q estoy atravesando x un momento dificil en mi vida .leer todo esto me sirvio para darme cuenta de muchas cosas les estoy agradecida muy buenas las reflecciones los saludo atte ana

  3. leer el estracto me ha servido para identificar lo que siento en estos momentos, y lo que por un periodo de quince años habia estado muy dentro de mi conciencia pero no habia querido aceptar, el escudo del que nos valemos muchas veces, con el que intentaba justificar mi modo de actuar culpando siempre a mi pareja, esto me ha impedido madurar. Es ahora cuando empiezo a comprender mi parte de responsabilidad.

  4. me encanta! es muy dificil mantener una pareja ,no todos lo logramos ,pero con amor verdadero se puede ,me encanta bucay ,me gustan sus libros y me enseña a pensar .

  5. ← Isla Desierta Busca Naufrago
    El sufrimiento… →
    Extractos del Libro seguir sin ti de Silvia Salinas y Jorge Bucay
    Publicado el 26 enero, 2010 por aliciatuma

    Es
    todo un desafío, poder expresar lo que a uno le pasa en pareja. Sin acusar al
    otro y sin defenderse.

    Hay
    una responsabilidad en uno de los miembros que es la responsabilidad de tomar
    la iniciativa por romper un pacto.

    Es
    entonces cuando afloran nuestras conductas más neuróticas e infantiles…

    Las
    ganas de volver a estar juntos, es el elemento clave que hace que una relación sea
    potencialmente salvable luego de una infidelidad o crisis de pareja importante.

    Cuando
    hay ganas de estar juntos, el corazón de ambos se rebela ante la posibilidad de
    una separación definitiva.

    Cuando
    el ojo de la tormenta pasa y las emociones se estabilizan tanto el uno como
    otro, necesitan gestos concretos de su compañero o compañera, especialmente
    aquellos gestos que demuestran que el otro me sigue importando. Que es
    importante para mi seguir teniéndolo en mi vida.

    Que
    estoy haciendo y que estoy dispuesto a hacer para que mi pareja note lo mucho
    que importa? La suma de minúsculos gestos cotidianos es lo que crea el clima
    favorable para el reencuentro.

    No
    hay manera de saber de antemano como va a funcionar una relación, ni de
    calcular si va a durar pero se lo consigue entregándonos a lo que hay, sin
    exigencias y sin expectativas. No es fácil.

    Cuando
    uno ha sido herido y no quiere que le vuelva a pasar lo mismo, para evitarlo,
    tenemos ideas, estrategias, expectativas, de cómo debería ser nuestra próxima relación.
    Nos volvemos rígidos, exigentes y no dejamos que la relación fluya en forma
    natural. Queremos “empujar el rio para nuestro lado”, para que corra por donde
    decidimos que nos conviene y entonces la relación se vuelve forzada y sin
    libertad.

    A
    medida que crecemos dejamos atrás la manera de enamorarnos de los veinte años, quizá
    quede atrás algo de locura, pero pueden abrirse paso la profundidad y la
    madurez, una madurez necesaria para que sin dejar de buscar un amor perfecto,
    seamos capaces de disfrutar de un amor real entre personas reales.

    Si
    somos lo suficientemente valientes como para reconocer esta situación, podríamos
    convertir al otro en un maestro en lugar de un enemigo. Si sabemos mirarlo de
    esta forma, la magia puede volver y los conflictos pueden convertirse en una
    señal pero positiva, de los aspectos que cada uno debe desarrollar.

    Cuando
    la grieta se produce, cada integrante de la pareja comienza a ver en aquel que
    antes lo completaba, el rostro de un enemigo.

    Como
    se sale si es que hay salida?

    La
    relación de pareja es uno de los más grandes espejos que tenemos para mirarnos,
    el mejor y el más cruel de los espejos. Nos enojamos porque la imagen que el
    nos devuelve no nos gusta. Entonces es el espejo el que nos hace horribles?

    Nos
    enojamos con el que da la noticia que no queremos recibir, quisiéramos actuar
    como Caligula, matando a todo aquel mensajero que no trae buenas noticias, como
    si con eso consiguiera que la mala noticia desaparezca.

    Apelando
    a la valentía de mostrar las partes vulnerables para pedir ayuda en lugar de
    levantar muros de defensa. Cuando las partes débiles de los dos que discuten
    consiguen conectarse y comprenderse, crece la confianza y cada uno puede ser el
    maestro del otro, allanando el camino para que la mágica conexión de almas
    aparezca.

    Por
    mas que vivamos planificando y pretendiendo controlarnos a nosotros mismos y a
    nuestro entorno nada suele suceder como esperamos. Este hecho es tan
    verificable en la realidad que se parece más a una verdad de Perogrullo que a
    un pensamiento intelectual. Y sin embargo, hay un montón de gente que actúa,
    vive y siente como si las cosas no funcionaran así.

    Discutir
    y agredir al otro por algo que ya nos hizo y nos lastimo, es un acto de
    inmadurez absoluta y básicamente una batalla perdida. Porque lo que esta hecho, hecho esta.

    Mirando
    hacia adentro apareció un mi un sentimiento casi ya olvidado… No sabia como
    hacer para aceptar mis limitaciones sin olvidar de reconocer mis capacidades.

    Mas
    que nunca cuando formamos una familia la sociedad nos anuncia que ha llegado la
    hora de funcionar mas como “se debe” que de acuerdo con lo que se sentimos en
    cada momento. Asi es como solemos
    perdernos a nosotros mismos y vamos renunciando de a poco a la alegría, a la frescura
    y a la espontaneidad. No hace falta
    decir, que sin estas tres herramientas, no puede haber una sana sexualidad…

    Es
    por eso que muchos, entran en una carrera frenética de cambio de compañero, de
    salir con cualquier persona… buscando sexo por sexo mismo. Pero ese sexo de la
    genitalidad, no implica una conexión con el otro. Ese sexo no eleva a nadie.
    Porque en sentido estricto es un sexo sin sexualidad. Mantener y desarrollar un
    contacto sano con la vida es ser uno mismo y enamorarse de estar vivos en todos
    sus aspectos. En eso consiste el cultivo del terreno del amor. Cuando el
    terreno está listo, la mayoría de las veces florece nuestra mejor sexualidad,
    lo que posiblemente incluya lo genital, pero que no se acaba ahí.

    Hay
    que ser conscientes de que en verdad no es posible “tener” nada, mucho menos a
    alguien. Pero preferimos dar por sentado que nada cambiara. Miramos nuestro
    compañero y creemos estar viendo siempre al mismo, porque decidimos que así es.
    Pero no es.

    No
    pienso que la pasión tenga que sostenerse sobre la base del miedo a perder al
    otro, porque estoy segura que nada bueno puede crecer basado en el miedo. Digo
    que las parejas duraderas están hechas de una sabia mezcla de cercanía y
    espacio. Cercanía que genera intimidad, respaldo y seguridad. Espacio que nos
    hace libres y conscientes de nuestras posibilidades de cambio. No hay límites
    para cambiar, porque no hay límites para crecer y ese es el sentido de la
    pareja: Crecer al lado del otro. La vida
    compartida es una oportunidad para eso.

    La
    verdadera pasión no se mantiene cambiando de partenaire todos los días, sino
    descubriendo que nosotros, los dos, somos un poco distintos cada mañana, y a
    partir de allí, el sexo, la pasión, el deseo y la atracción por el otro pueden
    renovarse dia a dia. Es necesario entrenar la pasión. Ya que no hay cosas
    apasionantes sino pasión puesta en las cosas.

    Es
    inútil además de poco aconsejable, siquiera intentar tenerlo todo bajo control
    o querer anticiparse a lo que sigue. En esa época aprendí que, nos guste o no
    lo que la vida tiene para darnos no se detiene a escucharnos, la vida fluye,
    solo fluye.

    Cuando
    luchamos contra lo que es, por ser como es, interrumpimos el libre fluir de los
    acontecimientos y evitamos que la situación pueda evolucionar hacia mejor.

    Hay
    un ejercicio muy bueno que nos ayuda a salir de la no aceptación de cosas que
    nos pasan y nos corren del papel de victimas en el podemos encontrarnos, pensar
    que:

    Para
    aprender a…

    Para
    darme cuenta de que…

    Entender
    es con la cabeza, comprender es con el corazón. Y si mi corazón está herido,
    muy difícilmente pueda terminar de asimilar lo que haya pasado.

    Igualmente
    hay que reconocer que fue él, quien me enseño a tomarme la vida con mas
    levedad, a no hacerme tanto problema por cada cosa.

    Me
    siento estafada, no tenida en cuenta y una vez más abandonada. Una vez más no
    elegida… Sentimiento terrible para la autoestima de una mujer…

    Nuestro
    compañero o compañera es un maestro. Alguien que nos enseña cosas importantes
    de maneras muy extrañas (a veces provocando nuestra furia).

    El
    amor y sus vaivenes, los encuentros y desencuentros, son guías que nos muestran
    los problemas que siguen habitándonos y que somos capaces de ver de otra
    manera.

    No
    hay conflicto que no tenga salida. Lo que cierra el camino no es el conflicto,
    sino el orgullo, el endurecimiento, la cerrazón. El precio de nuestra reacción no
    lo paga solamente la relación de pareja, sino que nosotros mismos perdemos
    contacto mismo con la magia de la vida. Nos volvemos personas cerradas. La idea
    y el deseo de que es posible complementarme con el otro.

    No
    es necesario que nadie me de lo que yo ya tengo. Nada nos falta. Pero si
    precisamos, una y otra vez de alguien que con amor sea el espejo en el que
    podemos vernos sin temor. Esa será la ayuda que me permitirá destrabar los
    mecanismos que me impiden volverme la mejor persona que yo puedo ser.

    Tener
    un vínculo fuerte y duradero es lo que toda persona normal aspira. Tener una relación
    clara. Lo vivido fue y es importante.

    El
    camino no es estar de acuerdo con lo que el otro hace después de separado, pero
    se puede intentar entender sus razones, aunque sean muy distintas de las propias.
    Aceptar que el otro tiene sus razones para hacer lo que hace aunque yo no lo
    comparta. Por algo las personas se separan…

    No
    es el más seguro de los hombres pero me dio seguridad.

    No
    es el más valiente pero siempre me ayudo
    con mis miedos.

    No
    es
    el más exitoso pero siempre me ayudo con mi desarrollo personal y
    profesional.

    Me
    apoyo siempre y yo crecí mucho a su lado.

    La
    vida siempre concede más de una oportunidad para darnos cuenta de todo lo que
    nos sucede y para crecer en ese darnos cuenta. El cosmos conspira para que las
    mismas situaciones se repitan una y otra vez, hasta que aprendamos lo que
    debemos aprender de ellos.

    La
    jugada era tan maquiavélica como eficaz. El había querido que yo me entere,
    pero sin decírmelo directamente.

    Nada
    a lo largo de la vida permanece constante. Poco o mucho, cada uno de nosotros
    va cambiando en sus pensamientos, en sus gustos, en sus comportamientos. Del
    mismo modo, el mundo que enfrentamos se transforma día a día. Lo que aprendimos
    ayer, quizá no sirva, tal cual, para hoy, porque hoy otras cosas suceden y aun
    las mismas cosas pasan de forma diferente. Este cambio constante es lo que
    transforma la vida en una apasionante y sorprendente novedad continua y
    cotidiana. La pareja es parte de la vida de una persona, y esta sujeta a los
    mismos cambios para los que no siempre estamos preparados, y por lo tanto es
    inevitable que las crisis de pareja ocurran. Algo nuevo sucede o viene
    sucediendo y rompe el equilibrio al que se había llegado y no es posible
    arribar a un nuevo equilibrio, entonces se produce la crisis. Es algo norma y
    natural, es parte de la vida de la pareja. Si queremos que la pareja perdure,
    no se trata de evitar los “desequilibrios” sino de aprender a resolverlos.

    Detrás
    de cualquier crisis hay un desbalance. El centro se ha corrido, los miembros de
    la pareja ya no se perciben el uno al otro en igualdad de condiciones “como
    antes”.

    Necesitamos
    dar y recibir, especialmente en la pareja si queremos seguir creciendo al lado
    del otro. Para que haya verdadera intimidad en una atmosfera relajada, ambos
    individuos necesitan tanto sentir que dan algo de si, como saber que también reciben
    algo.

    La
    mutua alimentación no siempre puede mantenerse equilibrada.

    Hay
    muchas circunstancias que inclinan la balanza a lo largo de la vida de la
    pareja.

    Aprendí
    que las heridas, los desencuentros, y las crisis son ciertamente dolorosas pero
    es completamente imposible evitarlas si hablamos de una relación comprometida.

    Hay
    una herida esencial que todo ser humano tiene. Y esa herida es no querernos lo
    suficiente.

    Hay
    un ejercicio de Jorge Bucay que propone escribir cosas que no hemos recibido en
    la infancia y hubiéramos querido que sucedieran…. “Un papa que me escuchara y
    estuviera presente cuando yo lo necesitaba”. Y luego se cambia a esa lista, la
    consigna por coas que espero de un hombre. El resultado es sorprendente, viví
    toda mi vida buscando en cada encuentro un papa que me diera el amor que no recibí
    de niña y que por eso no sentía dentro de mi. La sanación ocurrió cuando pude
    conectarme con el amor que los hombres me habían dado, comenzando por mi padre,
    en lugar de enojarme por lo que no me pudieron dar. La sanación ocurrió cuando
    pude ver a la niña herida dentro mío dentro de todas las personas que me
    amaron, y valorar lo que me dieron…

    Me
    pase la vida buscando a alguien que llenara el vacio del amor que acarreaba de
    la infancia y finalmente había descubierto que mi vida estuvo siempre sostenida
    por el amor que llevo dentro.

    Te
    quise mucho, todo lo que te di te lo di con ganas, tú me diste muchísimo y te
    lo agradezco. Pero nos dijimos un montón de cosas feas , sumamente dolorosas y todo quedo mal entre
    nosotros, yo asumo mi parte, y espero que
    vos asumas la tuya. Aunque te agradezco por todo lo feliz que me hiciste y el dolor que me causast

  6. ahora estoy pasando por una situación parecida con el padre de mis hijos y estas palabras me están haciendo comprender que no es bueno aferrarse alguien que mutuamente se han herido,
    y en mi caso estamos dañando a terceros, lo difícil es que el no acepta sus dudas y no quiere compartir ayuda para nuestros hijos.

    1. la verdad , esta muy bueno, es para aprenderlo , aun sabiendo no es facil…………………pero sentimientos de pareja es muy complicado….

  7. Es uno de los poco libros que te hacen pensar, que ven el matrimonio desde otro punto de visto. Es muy dificil manter una familia en estos tiempos ya que la socoedada esta muy desgastada pero, hoy nos muestran ustedes que si se puede y que el amorn entre dos personas es lo que mas vale. muchas gracias por ese gran libro y sigan cosechando muchos excitos

  8. En estos momentos dificiles x los q estoy pasando y( en los cuales debo reconocer q me meti yo sola) leer estos pensamientos reconfortan mi alma y alivian mi corazón. Gracias

  9. Jorge Bucay eres mi ídolo!!!! mi mayor sueño y meta de vida es aparecer en tu revista!!!!
    es la mejor =) =) =)

  10. Estoy en estos momento pasando por una crisis de pareja muy fuerte mi pareja me ha defraudado totalmente yo que siempre pense que era mi eterno enamorado que me queria y deseaba como a nadie que todos sus pensamientos eran para mi y sobre por todo lo que hemos tenido que pasar para estar juntos todos estos años resulta que ultimamente lo veia muy entretenido con su computadora nunca pense mal de el aunque mi instuicion me decia otra cosa es increible pero es asi y un dia lo hice me meti en su computadora y descubri que no era la musica ni los videos loque lo entretenian eran muchas chicas pero muchas osea cerca de 100 y entre ellas muchas las buscaba para sexo mas encima eran de la misma ciudad ese dia todo se derrumbo su imagen su amor lo odie y muchos sentimientos mas a pasado un tiempo ya y ya nada es igual he llorado mucho mesiento muy mal sicologicamente y me gustaria que don jorge me diera un consejo siento mucha rabia y siento que lo estoy odiando y si no le hubiera hecho caso a mi intuicion y no hubiera revisado la computadora el seguiria con sus sucias costumbres ..

  11. Es muy cierto todo, y a la vez, muy dificil
    Como puedo hacer yo para desengancharme? Yo si lo kiero! Hace ya un año de la separacion y no logro levantarme y seguir sola.

  12. es duro aseptar su parte de responsabilidad, en lo que corresponde a uno tengo ya 3 años de estar viviendo este duelo de separacion y no es facil cuando uno tiene hijas y tambien mira uno como tambien ellas viven ese duelo. lo que si se es que aprende uno a mar mas la vida y asus hijos. en este corto caminar de duelo me a sido de compañero y gran ayudaq todos las palabras de este gran hombre. jorge bucay. gracias por exitir en mi vida.

  13. Las palabras reconfortan, es cierto. Lo que cuesta es atravezar el dolor, largo y amargo proceso si los hay…Ojala todos podamos seguir en paz…

  14. yo llevo 6 años separado,divorciado y alejado y prueba superada,pero el primer año fue trbajo como si fuese bucay y cuando lei este libro y muchos mas yo lo habia echo por instinto y tal cual genial cuesta muxo pero ,son muxas las terapai no solo una vamos adelnate todos podemos …………………..

  15. En momentos es tan desgarrador leer esto al sentirme identificada con la lectura porque la mano que escribió esto es como si fuera mis pensamientos mas profundos que nunca supe explicar di con el libro por casualidad al buscar ayuda por sentirme tan mal ante una separacion, se lo mande de inmediato a mo esposo y lo compro se que el hubiera no existe pero si tan solo en mis manos hubiera estado esto antes me habria ayudado a sobrellevar y a entender tantas cosas xq como lo dice aqui las ganas de estar las tengo las formas no las se espero poder ser mejor persona y algún día volver a comentar aqui y agradecerles por la ayuda ya que una de dos supere mi separacion o retome la relación con el hombre que amo profundamente …

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