Pertenezco A Una Especie Rara Y Difícil De Hallar…

No son tanto las  técnicas sino las personas que las practican, y quizás existen algunos que  las modifican o las revolucionan. ¿Por qué ha de existir un solo modelo válido al que, al parecer, han  de ajustarse las personas de este mundo  mundial? Me cruzo con muchas  personas o seres espirituales viviendo una vida humana que no se hallan a gusto en este mundo, que no saben qué hacen aquí, que buscan a los suyos, a  los de su especie, una ciertamente rara y difícil de hallar.
Entre los  animales, estoy segura que ninguno se  siente deprimido por no ser jirafa o  león, no creo que se lleve el modelo cocodrilo como válido, y que todos  tengan que hacer el pino con las orejas tratando de parecerse al cocodrilo…  Más bien,  el león está feliz de ser león, el cocodrilo de ser lo que es y  todos tan hermosos… Pero hete aquí que existe la raza humana plena de  seres disfuncionales, raros, extraños y neuróticos perdidos… ¿De  verdad es así? Por qué una persona ha de ser como otra, por qué no ha de intentar descubrir quién es y cómo es y desde ahí mostrárselo al mundo sin pudor y con  deleite… Especies humanas que han de  asumir que lo son, en  vez de  considerarse una sola especie. Modelos sociales, espirituales y de almas. "Todo  depende del color del cristal con que se mira". Uno es quién es, y ha de  aprender a descubrirlo,  amarlo y disfrutarlo. Nadie es más que nadie, ni  menos. Nuestra mente se alimenta de pensamientos, lo mismo que el alma se  alimenta de emociones y de vivencias. Si usted no se daría de comer  veneno,  cómo es que se da pensamientos negativos y emociones negativas… Atrévase  considerar que quizás su punto de vista estaba equivocado, y que tal  vez, solo tal vez, usted no es tan raro ni  tan disfuncional como  algunos pretenden hacerle creer solo porque no se ajusta el modelo social  reinante (a saber: casarse, vivir en la misma casa si tiene pareja, tener  hijos si es mujer o tiene  cuerpo de mujer, trabajar y mantener a la familia  porque es hombre, gustarle las chicas ya que es hombre o  viceversa…) Nada es como parece, y las apariencias suelen  engañar. La libertad de ser  quién uno es proporciona más alegrías que  nada en este mundo. Una persona medianamente en paz consigo misma exuda  serenidad por todos los poros de su piel. Ahora bien, a los seguro/as de sí mismos/as se les suele tachar de "prepotentes" y suelen estar más bien solos… Viajar por su universo interior es una aventura fascinante, como lo es descubrir  las diferentes especies humanas que somos. Nunca le permita a nadie  que opine sobre usted, no tolere que nadie sepa más a cerca de usted mismo  que usted, o que le diga que está equivocado y que es raro o disfuncional. El  verano  pasado me contaron a modo de metáfora lo atrevidos que somos de opinar  sobre alguien cuando apenas conocemos a ese alguien: "Imagine que entra en  una sala a oscuras, está en la más absoluta  oscuridad, y usted solo lleva una  linterna para alumbrarse. Imagine que enfoca con la linterna un punto de la  sala. Ahora trate de deducir o de imaginar el resto de la sala tan solo a  partir del  trozo que ilumina el foco de la linterna, ¿podría decirme cómo es  el resto de la sala? A buen seguro que no. Pues eso es lo que hacemos con las  personas: hablamos de ellas cuando solo conocemos un  pedacito. Y es más,  encima las filtramos por ese filtro que dice la PNL que tenemos a través del  cual percibimos la realidad (eso llamado realidad), ¿imagina cómo se ve la  calle a través de unos  cristales sucios, muy sucios? Pues así nos ven  algunos: un trocito de nosotros a través de su filtro sucio. Por  consiguiente, no permita que nadie le diga que es raro o diferente, y si lo  hace  alguien, respóndale que usted es otra de las especies humanas, ni mejor ni peor, tan solo diferente…    

Rosetta Forner                                

Diamante Extraordinario…

Érase una vez una gran maestra a la que un aprendiz de maestro acusaba de charlatanería y psicología baratas. Ante tales acusaciones, la gran maestra, como única  respuesta, rebuscó en sus bolsillos y sacó una bolsita de tela de cual extrajo una piedra preciosa. Entregándosela al aprendiz de maestro, le dijo: “Ve a aquellos bazares, y pide que te ofrezcan cien monedas de  oro por ella.” El aprendiz de maestro fue a los bazares y, enseñando la piedra preciosa, pidió que le dieran cien monedas de oro por ella. Los comerciantes se rieron ante semejante osadía. El aprendiz de  maestro regresó junto a la gran maestra, y le relató lo qué había sucedido. La gran maestra le comentó: “Ahora ve a aquella joyería de la esquina y muestra la piedra.” El aprendiz de maestro fue, y al  enseñársela al joyero, éste, sin darle tiempo a nada, le ofreció cien monedas de oro. El aprendiz de maestro no salía de su asombro. Regresó rápidamente al lado de la gran maestra para decirle que ella tenía  razón: alguien le había ofrecido cien monedas de oro por la piedra.

La gran maestra le respondió: “Para poder apreciar una piedra preciosa, hay que ser joyero. Sólo cuando seas un joyero podrás mis palabras apreciar.”

A todos los que les han “dado calabazas.”

A todos los que no han sido apreciados en su justo valor, alguna vez en su vida.

A todos los que han creído que los de los “bazares” tenían razón. Llegando a pensar que ellos eran piedras sin valor, en vez de pensar que eran los otros los que no tenían  desarrollada la capacidad para poder apreciar y reconocer quiénes eran ellos (una joya.)

A todos los que se han sentido “patito feo” alguna vez en su vida.

A todos los que, siendo ángeles en la Tierra, son tachados de “prepotentes” u otros epítetos igualmente demoledores de la estima.

A todos los que buscan alcanzar la paz de espíritu.

Recuerde: la vida nunca nos da calabazas, sólo oportunidades para aprender a apreciar quiénes somos, reconocerlo y elevarnos por encima de la “ceguera” de los demás.

El haber hallado esta metáfora me ha ayudado a explicarles a muchos de mis alumnos, incluída yo misma, que por más “diamante extraordinario” que uno sea, se necesita siempre de un  joyero experto que lo reconozca… Los demás, los no joyeros, pueden llegar a pensar que es usted “circonita de la buena”, pero nada más. No se conforme con una o varias tasaciones, llévese a usted mismo a un  joyero experto. Pero ante todo y sobre todo: conviértase usted en ese joyero experto e independícese de la opinión (“tasación”) de otros.

Tengo muchos alumnos que se sienten -porque creen serlo- “circonitas”, que no diamantes. Suelo insistir en inculcarles la creencia de que solamente alguien que aprecia su luz y la  honra es capaz, a su vez, de apreciar y honrar la luz en otros. Se dice que somos capaces de reconocer en otros aquello que ya está reconocido en nosotros mismos. Por el contrario, todo aquello que nos disgusta en  otros es un claro reflejo (proyección) de algo que en nosotros no está resuelto, o está todavía en estado “conflictuado.”

Los filtros de la realidad, la percepción de otras personas está condicionado por las creencias que tenemos acerca de la vida y de nosotros mismos. Asimismo, las sponzorizaciones  positivas o negativas que otros nos han ofrecido, y las creencias que, a partir de ello, hemos construido, conforman y colorean nuestra realidad. No podemos ver a los demás cuando no somos capaces de vernos a  nosotros mismos. Y, vemos a los demás a través del mismo filtro de creencias con el que nos observamos a nosotros mismos.

¿Cómo convertirse en joyero?

Es un proceso largo, que requiere compromiso y honestidad para con uno mismo, y mucha sinceridad.

Convertirse en joyero tiene que ver con aprender a amar al ser que todos llevamos dentro, a centrarse en desarrollar “referencia interna”, es decir, descubrir, apreciar y honrar  nuestros dones, características, capacidades, habilidades y peculiaridades. Asimismo, consiste en aprender a respetar y aceptar incondicionalmente todos y cada uno de nuestros comportamientos del pasado. Nuestro  presente se ha construido sobre la base de nuestras vivencias y del cómo archivamos estas.

Sin la apreciación sincera y honesta de quiénes somos no es posible hacer lo mismo con otras personas.

Nos han enseñado a criticar, como única via para la “motivación”, y la crítica no suele ser precisamente constructiva que digamos. Siendo desde ella que nos acostumbramos a  relacionarnos con nosotros mismos y con los demás, y ella solamente nos conduce a ver “los defectos” existentes en cada uno de nosotros, porque sombra tenemos todos. Pero, recuerde: “Amamos a las personas,  pero no amamos sus comportamientos.”

Muchas veces las personas no soportamos la luz en otros, y no pudiéndola poseer, lo único que se nos ocurre es tratar de apagarla. Craso error.

Los balineses (de la isla de Bali), sostienen que las cosas nos las hacemos a nosotros mismos, no a los otros. También un colega mío añade: “la Vida nos trata reflejando el cómo nos  tratamos a nosotros mismos.” Así que ya sabe, si lo qué le devuelve la Vida no le gusta, pase a revisar cómo se trata a usted a sí mismo.

Practique la referencia interna: busque en su interior sus creencias a cerca de todo, y viva acorde a su congruencia. Los demás podrán estar en acuerdo o en desacuerdo con usted, pero  su vida, la suya, sólo le pertenece a usted, y usted decide cómo, cuándo y con quién quiere vivirla. Para eso es suya: “Sólo vuela aquel que se atreve a hacerlo. Nunca se arrepienta de haber vivido, si acaso  arrepiéntase de no haberse dado la oportunidad de haber vivido.”

Las creencias pueden cambiarse, renovarse o tirarse al cesto de los papeles. También pueden lavarse y pulirse. Muchas de las creencias que albergamos en nuestro interior tienen  procedencia de “referencia externa”, es decir, nos las han dado otros –es decir, no las hemos creado nosotros-. Búsquelas, y tírelas. Sí, tire las que no sean suyas. Y verá qué fácil es ser joyero.

Conozco a mucha gente que no cree en ella misma porque otros no creyeron en ellos: tuvieron sponsors negativos o demoledores de la estima. Es tan fácil acusar a los demás de nuestras  incapacidades. Es tan fácil proyectar en otros las culpas de nuestras no responsabilidades. Sólo cuando uno ha aprendido a amarse a sí mismo asume la responsabilidad sobre sus comportamientos, ideas, acciones, no  acciones, pensamientos y decisiones. Asimismo, coge al miedo y le planta cara, se lo lleva de copas.

Si tiene miedo, considere que es humano, y que tiene su intención positiva. Pero, busque, busque en su interior las referencias positivas, sus capacidades.

Dígase a sí mismo:

“SI OTRO PUEDE, YO TAMBIÉN.”

“TODAS LAS CAPACIDADES ESTAN DENTRO DE NOSOTROS.

“NO EXISTEN LOS FRACASOS, SÓLO SON RESULTADOS.”

“TODO RESULTADO ES INFORMACIÓN”

No más calabazas desaprovechadas.

Sea su mejor joyero.

Recuerde que nadie sabe tanto de usted como usted mismo. Cada persona es un Universo inmenso por descubrir, y para hacerse una idea del mismo uno ha de atreverse a observarlo con los ojos  de la inocencia de un niño: sin prejuicios, con admiración, con deleite, sin reservas, con apertura. Así es como mira un joyero a una piedra preciosa –gema- de excelente calidad.

A veces, las piedras preciosas están recubiertas de una capa de suciedad, pero un auténtico joyero siempre será capaz de reconocerlas, no importando las condiciones. El amor  incondicional nos contempla con ojos eternos que ven más allá de las máscaras, de los errores, de los comportamientos, y de todo… Viendo siempre la belleza que vive en el corazón de cada uno de nosotros.

El Ego Y El Presente…

La relación más importante y primordial de la vida es la relación con el Ahora, o mejor aún, con cualquiera que sea la forma que adopte el Ahora, es decir, lo que es o lo que sucede. Si la relación con el Ahora es disfuncional, esa disfunción se reflejará en todas las relaciones y en todas las situaciones de la vida. El ego podría definirse sencillamente como una relación disfuncional con el momento presente. Es en este momento cuando podemos decidir la clase de relación que deseamos tener con el momento presente.
Una vez que hemos alcanzado un cierto nivel de conciencia, es decir, de Presencia (y si está leyendo esto es porque seguramente es su caso) estamos en capacidad de decidir qué clase de rela ción deseamos tener con el momento presente. ¿Deseo que éste momento sea mi amigo o mi enemigo? El momento presente es inseparable de la vida, de tal manera que nuestra decisión se refiere realmente a la clase de relación que deseamos tener con la vida. Una vez tomada la decisión de ser amigos con el momento presente, nos toca dar el primer paso: mostrarnos amigables con él, acogerlo independientemente de su forma de presentarse. Y no tardaremos en ver los resultados. La vida se torna amable con nosotros. La gente nos ayuda y las circunstancias cooperan. Pero es una decisión que debemos tomar una y otra vez, hasta que aprendemos a vivir naturalmente de esa manera.
Con la decisión de hacer amistad con el momento presente viene el fin del ego. El ego no puede nunca estar en consonancia con el momento presente, es decir, en consonancia con la vida, puesto que su propia naturalez a lo induce a resistir, menospreciar o hacer caso omiso del Ahora. El ego se nutre del tiempo. Mientras más fuerte el ego, mayor es el tiempo durante el cual controla nuestra vida. Casi todos nuestros pensamientos entonces se refieren al pasado o al futuro y el sentido de lo que somos depende del pasado, donde encuentra una identidad, o del futuro donde busca su realización. El temor, la ansiedad, la expectativa, el remordimiento, la culpa, y la ira son disfunciones del estado de la conciencia atrapado en el tiempo.
El ego trata el momento presente de tres maneras: como un medio para una finalidad como un obstáculo o como un enemigo. Analicemos una a la vez, de tal manera que cuando ese patrón se apodere de usted, pueda reconocerlo y decidir nuevamente.
En el mejor de los casos, el ego ve en el momento presente un medio para cumplir una finalidad. Sirve para llevarnos a algún momento en el futuro considerado más importante. Pero el futuro nunca llega salvo como momento presente y, por tanto, nunca es más que un pensamiento en la cabeza. En otras palabras, nunca estamos totalmente aquí porque siempre estamos ocupados tratando de llegar a algún otro lugar.
Cuando este patrón se acentúa, lo cual suele suceder, el momento presente es visto o tratado como si fuera un obstáculo a superar. Es allí donde surgen la impaciencia, la frustración y el estrés y, en nuestra cultura, esa es la realidad cotidiana, el estado normal de muchas personas. La Vida, la cual ocurre ahora, es vista como un "problema", y todos habitamos en un mundo lleno de problemas que debemos resolver para ser felices, sentirnos realizados o comenzar realmente a vivir (o por lo menos eso creebmos). El problema está en que, por cada problema que resolvemos aparece uno nuevo. Mientras veamos un obstáculo en el momenbto presente, los problemas no tendrán fin. "Seré lo que deseas que sea", dice la Vida o el Ahora. "Te trataré como tú me trates. Si me ves como un problema, eso seré para ti. Si me tratas como a un obstáculo, seré un obstáculo".
En el peor de los casos, y esto también es muy común, el momento presente es visto como un enemigo. Cuando odiamos lo que hacemos, nos quejamos de nuestro entorno, maldecimos de las cosas que suceden o han sucedido; o cuando nuestro diálogo interno está lleno de lo que deberíamos o no deberíamos hacer, de acusaciones y señalamientos, entonces nos peleamos con lo que es, con aquello que de todas maneras ya es como es. Convertimos a la Vida en nuestra enemiga y ella nos dice, "si lo que quieres es guerra, guerra tendrás". La realidad externa, la cual es siempre el espejo de nuestro estado interior, se experimenta como algo hostil.
Una pregunta crucial que debemos hacernos con frecuencia es ¿cuál es mi relación con el momento presente? Después debemos estar alertas para descubrir la respuesta. ¿Trato el Ahora apenas como un medio para llegar a una finalidad? ¿Lo veo como un obstáculo? ¿Lo estoy convirtiendo en enemigo? Puesto que el momento presente es lo único que tendremos, puesto que la vida es inseparable del Ahora, lo que la pregunta significa realmente es, ¿cuál es mi relación con la vida? Esta pregunta es una forma excelente de desenmascarar al ego y de entrar en el estado de Presencia. Aunque la verdad absoluta no está encarnada en la pregunta (en últimas, yo y el momento presente somos uno), es una guía importante hacia el camino correcto. Hágase esa pregunta con frecuencia, hasta que ya no la necesite.
¿Cómo trascender una relación disfuncional con el momento presente? Lo más importante es reconocerla en nosotros mismos, en nuestros pensamientos y en nuestros actos. Estamos en el presente en el momento mismo en que notamos que nuestra relación con el Ahora es disfuncional. Ver equivale al afloramiento de la Presencia. Tan pronto como vemos la disfunción, ésta comienza a desvanecerse. Algunas personas se ríen cuando ven esto. Con el reconocimiento viene el poder de elegir: la posibilidad de decirle "sí" al Ahora y de aceptarlo como amigo.

Eckhart Tolle

Porque Se Termino?

Muchas veces vemos como una aparente “relación perfecta” se desmorona y debemos ver la forma de  voltear esa desilusión o dolor en crecimiento personal.

Sucede muchas veces que cuando las personas encuentran a esa persona tan especial, comienzan a verse seguido. Pasan mucho tiempo platicando de todo, desde su color favorito hasta comida y compartiendo experiencias juntos. ¿Donde había estado esta persona? ¿Porque nos tomó tanto tiempo encontrarnos? En tu mente e imaginación puedes verlos a los 2 juntos para siempre.

Y después, talvez en unas semanas o meses más tarde ya no están juntos y te preguntas, “¿Hice algo mal? ¿Me esta jugando una broma el universo? Pensé que este era el indicado. ¿Que paso?” Encontraron alguien más. O descubriste algo de ellos que causo que te alejaras. Talvez solo se fueron separando poco a poco. Una cosa es cierta, la desilusión de esta relación comienza a liberar una ola de depreciación personal y a reforzar los patrones antiguos. “talvez pueda ser para otros, pero no me va a suceder a mi” y “perdí mi única oportunidad de tener el amor verdadero”

Veamos algunas razones porque una aparente “relación perfecta” puede no durar por siempre:

# 1
La Ley de la Atracción nos enseña que atraemos personas, oportunidades, situaciones y cosas que están en armonía con nuestra vibración dominante. Lo que sucede, a veces, es que esas personas están en armonía temporal, y después una persona toma una decisión o cambia y se coloca en un camino que ya no esta en armonía con nuestra vibración.

Aquí hay un gráfico que muestra lo que pasa cuando alguien cambia su vibración:

Mientras nuestra vibraciones están en armonía al principio, en algún momento comienzan a tomar diferentes caminos y se pierde la sincronizidad… Y para que la Ley de Atracción atraiga a 2 personas ellas tienen que estar en sincronizidad.

# 2
No te diste cuenta de que algunas cosas en una relación son muy importantes hasta que la relación ha terminado. Muchas veces ocurre que no nos damos cuenta de lo importante importante que es atraer un amante que ha sanado su pasado y sus heridas. Suele ocurrir que personas se enamoran, pero alguno de los dos, no puede mantenerse en la relación debido al miedo de que el otro algún día lo deje o lo engañe como su pareja anterior… Para protegerse a si mismos, muchas veces las personas deciden terminar las relaciones.

# 3
Tu ser interno esta listo para que evoluciones hacia un nivel de auto-aceptación mayor.

Así es, tu ser interno sabe cuanto dependes de los demás para tu autoestima y entonces prepara las cosas para una situación dramática (y a veces dolorosa)

Este ser interno es el verdadero TU. Al que has estado evadiendo por tanto tiempo. Tu ser interno tiene un mensaje para ti y quiere tu atención, y la tendrá tarde o temprano. Mientras antes sea, más fácil será la lección.

Conoci gente que casi con 80 años, está confrontando esta lección y es tan doloroso verlos luchar con ella… La BUENA NOTICIA es que tu ser interno solo quiere tu bien y el más elevado, lo que incluye:

Conocerte
Aceptarte
Honrarte
Confiar en ti
Amarte

Una vez que creamos que SOMOS magnificentes, deliciosos y espíritus diseñados maravillosamente teniendo una experiencia humana, y que no hay nada malo en nosotros, que estamos COMPLETOS y que no necesitamos a otro ser humano para sentirnos completos, entonces estamos listos para la más deliciosa profunda y gratificante relación. Todos nuestros deseos se manifestarán en varias relaciones significantes y/o intimas.

Pregúntate:

“¿Estoy dispuesto a aprender más de mi y aceptar todas las partes de mi?”
“¿Estoy dispuesto a valorarme?”
"¿Amo cuidarme lo suficiente como para sobreponerme a perder a un amante?”
“¿Puedo usar esta oportunidad para entenderme mejor?”

Si estás dispuesto a crecer y aprender más de ti mismo a través de la perdida de una relación, lo más probable es que atraigas a alguien en tu vida que sus vibraciones estén bellamente armonizadas con las tuyas.

El Tiempo…

 

"El tiempo es demasiado lento para aquellos que esperan… demasiado rápido para aquellos que temen…. demasiado largo para aquellos que sufren…. demasiado corto para aquellos que celebran… pero para aquellos que aman, el tiempo es eterno."

(Henry Van Dyke)

Esta Gris Amor…

Tu patria amor
es también la mía.
Mi lucha hubiera sido seguirte
en silencio en nuestro espacio,
con el plato en la mesa minutos,
horas, días… la eternidad.
Las sábanas limpias esperando
y mi calor descansando.
Tal vez hubiera sido así,
no sé, no me dejaste elegir.
Me cortaste las alas
y me dejaste paralizada en mi estupor
sintiéndome una estatua
digna esfinge de observar,
fría como el mármol y vacía la mirada.
Esta última carta de los versos del capitán,
que leí y releí
hasta que los ojos hinchados
por el llanto se cerraron
fueron escritos para "el amor"
Y ese amor, hoy no tiene mi nombre.
Ya no me lastimes.
Me despido,
te digo hasta siempre,
porque siempre
te voy a querer
a extrañar
y a observar
en cada margarita
y en cada rosa roja
que pueda acariciar…

(Fragmento de "Está Gris" de A Pablo Neruda)

Porque No Estoy Con El Amor De Mi Vida?

La Ley de Atracción esta siempre reflejando de regreso tu vibración. Recuerda: Tu puedes saber que es lo que estás vibrando, observando que es lo que está apareciendo en tu vida.

Cuando piensas que estas enamorado de alguien – y estás seguro que son “los indicados” pero no puedes convencerlo o convencerla o atraerl@, no es el/la indicad@. Si lo fueran ya estarían en una relación juntos – una relación mutual, armoniosa y natural hacia la que los 2 de ustedes gravitaran en igualdad.

Hay 2 posibles escenarios pasando:
Estás enamorad@ con la idea de que esta persona este enamorad@ de ti. Que alguien, con esos atributos físicos, características o éxitos en la vida pudiera querer estar contigo, es una idea emocionante.

Lo que frecuentemente sucede es que necesitas a alguien que tiene 5 (o 10) características que estás buscando en una pareja ideal y asumes que el o ella es la “compañía perfecta.” Piensas, “¡Esta es! He encontrado al indicado para mí para el resto de mi vida.” Sin embargo, la atracción no parece mutua y no llegas a comprender porque.

¿Que no la Ley de Atracción los trajo a ti? Bueno, la pregunta real es: ¿Están buscando a alguien como tu? ¿Eres tu una pareja vibratoria para esta persona?

Recuerda que la persona que estás viendo solo puede parecer tener las cualidades que tu deseas. Debajo de la imagen exterior de belleza y éxito, puede haber una persona con metas, creencias y valores diferentes a los tuyos. Aunque sean muy similares, ¿qué está buscando el o ella? El rol de su pareja ideal puede ser muy diferente al que a ti realmente te gustaría jugar o interpretar.

El segundo escenario va así:
Estas enamorad@ de la idea de que se te "permita" amar a esta persona. Viendo su potencial y sus necesidades, tu puedes también ver de cuanta "ayuda" podrías ser tú para ellos como pareja. Buscar amor con este motivo es peligroso, especialmente porque, tristemente, hay una persona insegura y absorbente, esperando encontrar a alguien para poder darle significado y un propósito a su vida. (Pero no es muy sano esto.)

Las víctimas atraen a alguien que las haga víctimas de nuevo. El pobre atrae a alguien que les permita continuar en su pobreza. A La Ley de Atracción no se le hace tonta, o puede ser manipulada a través de palabras o expresiones de deseos que no están alineados con la verdad.

Pero tu ves a tanta gente feliz y enamorados a tu alrededor, ¿Porque no te sucede a ti?

Para poder atraer al "compañero ideal" – alguien que este en armonía vibratoria con quien tú eres – tu debes ser lo que buscas.

Estás buscando a alguien que sea bueno? Tu debes ser alguien bueno. ¿Quieren alguien que se vea bien? Te debe importar a ti como te ves. ¿Quieres a alguien que haga un compromiso contigo? Pregúntate "¿Mantengo mis compromisos?" ¿Quieres a alguien que sea exitoso? Pregúntate: "¿Estoy vibrando éxito?”

Recuerda, la Ley de Atracción te está atrayendo exactamente lo que estás vibrando. Si quieres algo diferente en tu vida, debe cambiar tu vibración. Es un trabajo interno y solo puedes cambiarte tu mismo, no puedes cambiar la vibración de alguien más.

Me referí al Segundo escenario como especialmente peligrosos por esta razón exactamente: no puedes cambiar a alguien más, y mientras tratas de hacerlo dejas de concentrarte en ti mismo, deteniendo cualquier cambio y crecimiento que necesite ocurrir contigo.

Tu PUEDES atraer a tu compañía ideal. Puedes encontrar alegría en una relación sana. Solo empieza contigo.

Conócete – Acéptate – Hónrate – Confía en ti y Ámate

Cuando lo haces, la relación más perfecta sucede de una manera perfectamente natural.

¿ Porque? Porque la relación sana que tienes contigo es reflejada en tu relación con esa persona importante…

Sola, no solitaria

  Algún día, probablemente, debas tener esto en mente… Sola, no solitaria…

Hay mucha diferencia entre estar sola y sentirse sola. Las mujeres, en especial cuando envejecen, necesitan aprender a reconocer la diferencia porque biológicamente viven más que los hombres.

Enfrentadas al hecho de vivir solas, debido a un divorcio, a la muerte del cónyuge o al final de una relación, las mujeres suelen decir: "No, no podría soportarlo, no podría seguir viviendo". A simple vista, este comentario parece un gran tributo romántico al hombre.

Sin embargo, decir: "No podría soportar vivir sin Fulano" equivale a decir: "No podría soportar vivir conmigo misma". Las circunstancias pueden obligarnos a vivir solas. Y ante la elección entre una relación enferma y vivir sola, recomiendo la cama medio vacía.

Las relaciones sin salida son otra forma de suicidio social. No vale la pena soportar matrimonios insalvables ni relaciones sin esperanzas, por el solo hecho de tener un hombre. Si nos liberamos de este peso muerto, podremos aprender a volver a vivir como individuos íntegros.

Piensen en las mujeres que conozcan, que viven solas. ¿Todas están hambrientas de sexo, son criaturas desesperadas y patéticas? Estoy segura de que no. De hecho, los estudiosos de la conducta han llegado a la fascinante conclusión de que los hombres casados y las mujeres solteras, en especial aquellas que tienen el apoyo de muchos amigos, parecen estar mejor preparadas psicológicamente para la vida.

La desesperada compulsión que nos lleva a rodearnos de personas cada minuto del día significa que no somos felices con la persona llamada "yo". Enfrentadas con nosotras mismas no deberíamos sentir terror. No deberíamos tener el impulso desesperado de hablar por teléfono. A veces podemos hallar una enorme satisfacción no haciendo nada, absolutamente nada, excepto lo que queramos hacer, sin rendir cuentas a nadie. Ya sea sumergidas en un baño de agua caliente o atrapadas por una novela de terror, podemos aprender a ser amigas de nosotras mismas. En realidad, nunca estamos solas, si nos consideramos compañeras valiosas, si podemos aprender a ser solas…pero no solitarias.

Comenzamos a acostumbrarnos a estar solas poco a poco. Como en todo, se requiere práctica. Al principio, en el momento en que se cierra la puerta en una casa vacía, puede ser irresistible el impulso de coger el teléfono para salir a pasear o coger el bolso para ir al supermercado, aunque no necesitemos nada. Este es el momento de aplicar nuestra propia receta casera para la modificación de la conducta. La primera vez, prométete que esperarás media hora antes de llamar a nadie o de huir de casa sin motivo alguno. Y no estés mirando a cada momento el reloj. Haz algo útil para llenar esos minutos, algo que te divierta, como por ejemplo practicar tu inglés para ese viaje del que has estado hablando, o cocinar galletitas para los hijos de tu vecino, que están enfermos.

La próxima vez, aumenta el período de soledad a una hora, disponiendo siempre de algo divertido y útil para pasar el tiempo. No permitas que los minutos vacíos se ciernan sobre ti como un terrible fantasma. Sigue aumentando la apuesta hasta que hayas pasado una tarde o una noche de sábado sola, pero no solitaria. La soledad productiva, como cualquier otro, es un hábito que se aprende, un buen hábito. Puedes adquirirlo de la misma manera en que puedes romper con el hábito de tener siempre compañía. Puedes convertirte en un buen compañero de ti mismo si te esfuerzas, si practicas.

La falta de amor y de reconocimiento en las mujeres como así también la falta de valorización y agradecimiento, de cariño, de mimo y de otras ternuras y gestos nos hacen sentir poco valiosas, poco importantes…Pero la falta de pareja en la mujer hace que sienta como que no vale lo suficiente para tenerla, entonces su autoestima se ve día a día lastimada y deja de reconocerse como una gran mujer para sentirse sola y hasta incluso abandonada… Siente por momentos que la felicidad del gran amor no es posible y en esa confusión en un determinado momento se prepara para seguir estando sola toda la vida. Y no es así…Todo llega en el momento justo, ni antes ni después. Todo se logra pero es importante aprender a quererse, a asumirse y a sentirse bien con una misma.

Si logramos estar bien en soledad, si una a una todas las partes de nuestro cuerpo crean una armonía perfecta, si dejamos de lado ciertas obsesiones para dar paso a la vida y no esperamos sólo nos dejamos llevar, y no buscamos sólo abrimos el corazón y el alma dispuestas a dar lo mejor de nosotras… Todo aparece, se encuentra, sin ninguna explicación lógica… porque sí… porque se dio… porque de pronto alguien detuvo la mirada en nosotras y en esos ojos vimos un camino por el que transitaríamos nosotros… los dos… luego…

No somos menos si estamos sin un compañero… Tal vez podríamos tener muchos y no ser felices con ninguno… No somos menos porque en este momento estamos sin pareja, o porque un hombre nos abandonó… No somos menos si habiendo amado mucho un hombre no supo valorar ese amor y se marchó… No!!! Somos importantes en la vida, en la lucha diaria, en el abrazo, sólo merecemos amores de verdad, de aquellos que nos contienen, que nos respetan, que nos llevan de la mano pero que siempre y en todo momento nos permiten ser, sentir y crecer…

Hay diferentes tipos de amor que muchas veces no lo son…parecen serlo nada más… Hay personas que tienen pareja pero se sienten tan solas y vacías como si no las tuvieran… Hay otras que por no esperar deciden caminar al lado de alguien equivocado, y esa persona en su egoísmo no permitirá que se aleje de ese camino, de el suyo, de el propio, aún sabiendo que no la hace feliz… Hay personas que sostienen matrimonios o noviazgos ya destruidos por el simple hecho de pensar que estar solos es difícil e inaceptable…

Hay personas que deciden ocupar un segundo lugar tratando de llegar al primero pero ese viaje es duro, incómodo y los llena de dolor y de abandono. Pero hay otras personas que están solas y viven y brillan y se entregan a la vida de la mejor manera… Personas que no se apagan al contrario, cada día se encienden más y más. Personas que aprenden a disfrutar de la soledad porque las ayuda a acercarse a sí mismas, a crecer y a fortalecer su interior…

Esas personas son las que un día sin saber el momento exacto ni el por qué, se encuentran al lado de una persona que las ama con verdadero amor… y se enamoran de una manera mágica.

Una mujer completa no necesita muletas… Vive y se entrega día a día y cuando se enamora se entrega a ese amor sin dejar de ser ella misma.

Así que recuerda, puedes estar sola… pero no solitaria…

El Miedo Al Amor…

La ciencia ha descubierto ahora, que el corazón piensa y tiene neuronas.

Hay gente que vive a la defensiva para no sufrir. El sufrimiento es parte de esta vida y no se puede evitar, porque todo ser humano tiene sentimientos y su propio mundo de significados los afecta.

El miedo a la pérdida es el que impide relacionarse mejor. Un encuentro que llega a sorprender, con alguien diferente que produce placer y que hace latir el corazón más rápido, puede ser la vivencia que se estaba esperando, no obstante, aunque la soledad sea la única compañía, antes de entregarse de lleno a esa experiencia comienza a levantarse la barrera automática que se ha creado ante cualquier señal de peligro y se adopta la postura clásica del no compromiso.

Negarse a comprometerse no representa solamente una actitud egoísta de no querer compartir la vida con nadie porque es más cómodo, sino que también tiene un significado psicológico con raíces más profundas; es el miedo a sufrir.

Ni bien dos personas se encuentran, cada una de las dos comienza a especular y a tratar de bucear en el intrincado interior del otro para conocerlo y entonces así poder desplegar toda la gama de artilugios para conquistarlo y si es posible dominarlo.

Pocos son los que se dejan llevar pasivamente frente a un fenómeno tan común y difícil como es la relación de pareja y se atreven a ser como son.

La química del primer encuentro no es casual, porque no somos sólo seres materiales sino también sociales y espirituales, atributos que no sólo están relacionados sino que conforman una unidad armónica, por lo tanto, lo natural tendría que ser que la persona total, tal como es, provoque la misma atracción.

Sin embargo, el fenómeno actual es que las personas estén disociadas, y tampoco se comprometan consigo mismos ni con valores, porque viven en un permanente relativismo, reflejando una apariencia que no concuerda con su forma de pensar, de hacer o de decir.

Es difícil imaginar cómo es verdaderamente una persona así y es imposible llegar a conocerla.

Toda relación es un vínculo que para que llegue a ser profundo necesariamente tiene que basarse en la sinceridad y la honestidad.

La sinceridad y la honestidad son valores que trascienden lo circunstancial, porque forman parte del código ético necesario para vivir en una sociedad y para precisamente evitar el sufrimiento.

El amor es la emoción primera, ya que por amor nacemos y la vida sin amor por temor está incompleta.

Y no me estoy refiriendo solamente al amor de pareja; porque el amor es la forma más perfecta de comunicación con los otros.

¿Por Que No Soy Feliz?

Mi primera respuesta a tu pregunta es otra pregunta:

¿Que crees TÚ que necesitas para ser feliz? ¿Que cosas

quisieras tener para experimentar felicidad? o ¿Que

personas necesitas tener a tu lado para sentirte feliz? o

¿Que circunstancias necesitas que cambien para que seas feliz?

Hay personas que nunca se sienten realizadas. Muchas

cosas le fastidian y le molestan. Ellos van por este

hermoso mundo corriendo desesperados como un niño que

afanado persigue el arco iris. A pesar del serio esfuerzo

del niño y su intento de acercarse, el arco iris parece

burlonamente alejarse. Para esas personas, la felicidad

siempre se haya mas allá de donde ellos se encuentran.

Un joven me decía: Me casaré cuando encuentre la persona

que traiga satisfacción a mi vida. Con esa filosofía de

vida algunos piensan: cuando encuentre a mi cónyuge,

entonces seré feliz. Otros que ya lo han encontrado y ya

se han decepcionado piensan "cuando me separe de mi

marido, entonces seré feliz". Algunos piensan: cuando

tenga hijos seré feliz y otros cuando se marchen,

entonces comenzará mi felicidad.

Para ellos tengo una mala noticia y si TÚ piensas así,

también te incluiría a ti.

Podrás tener riquezas y ser infeliz, estar rodeado de

las personas más amorosas y vivir las circunstancias

ideales, pero eso no quitará de ti todos tus males.

Es que la felicidad no se descubre al encontrar a la

persona apropiada sino en ser la persona adecuada. La

felicidad no esta en encontrar a quien te haga feliz sino

en aprender a traer felicidad a los que te rodean.

La felicidad la encuentra la persona que aprende a vivir

sabiamente. Establece relaciones saludables, pone

límites, acepta lo bueno y rechaza lo cuestionable. Es

feliz quien se acerca a las personas sin sospecha pero

con prudencia y se aleja de quienes le hacen daño, sin

maltratar pero con inteligencia. La felicidad la

encuentra quien aprende a usar las cosas y no a las

personas, quien no abusa ni permite el abuso. No es feliz

quien nunca recibe heridas sino quien sabe como evitarlas

y cuando es imposible, sabe como curarlas. No es feliz

quien nunca tiene problemas o todo tiene resuelto, sino

quien cuando estos llegan los enfrenta sabiamente y

cuando no puede, busca ayuda inmediatamente.

Te ruego, por tu propio bien que dejes de buscar la

felicidad en las cosas, personas o circunstancias que te

están rodeando y comiences a cambiar desde tu interior las

actitudes que le están afectando.